Por un lado, la 'fuga' de parejas jóvenes de la capital a municipios cercanos como Alhaurín de la Torre o Rincón de la Victoria, en busca de viviendas más baratas y entornos apacibles. Y por otro, la llegada de jubilados europeos atraídos por el benigno clima costasoleño. Son dos fenómenos radicalmente diferentes, pero ambos han contribuido a un mismo resultado: el espectacular aumento de la población del área metropolitana de Málaga. En la última década, esta zona conformada por la capital y los municipios de su área de influencia ha ganado 200.867 habitantes, un 25,5% más de los que tenía en el año 2000, según pone de manifiesto el anuario 2010 del boletín 'Málaga Economía y Sociedad', presentado ayer por la Fundación Ciedes. Su auge está detrás del fuerte crecimiento demográfico protagonizado por la provincia en los últimos diez años, cifrado en un 24,9% (diez puntos porcentuales por encima de la media andaluza).
Una verdadera explosión demográfica que ha situado a la población de Málaga y su área metropolitana al borde del millón de habitantes (987.813), una cifra que representa más del 60% de la población total de la provincia (1.609.557 personas). El auge poblacional de municipios como Mijas, Alhaurín de la Torre o Rincón de la Victoria es el que ha propiciado este salto, puesto que el crecimiento de la capital malagueña ha sido mucho más modesto, del 6,9%.
Envejecimiento
Y es que hay localidades que casi han llegado a duplicar su población desde el año 2000. Es el caso de Benalmádena, que ha crecido un 92%; o el de Mijas, con un 82% más de habitantes. En estos casos, así como en el de Fuengirola (cuya población ha aumentado casi un 50%), el auge demográfico está muy ligado al boom inmobiliario y al aumento de residentes extranjeros, un fenómeno que ha provocado un notable envejecimiento de la población. Según el anuario de la Fundación Ciedes, Fuengirola es el pueblo de Málaga con mayor presencia de jubilados en su población total, con un 18,3%. Una proporción que prácticamente duplica a la de Alhaurín de la Torre, otro de los municipios que más han crecido, pero en su caso debido a la llegada de jóvenes residentes. Esta localidad del valle del Guadalhorce es, junto a Alhaurín el Grande, Cártama y Rincón de la Victoria, la que más población menor de 16 años atesora en términos relativos: en torno al 20%. Frente a ellas, la ya citada Fuengirola solo cuenta con un 14,5% de niños y adolescentes.
El anuario de Ciedes destaca el «incremento experimentado por la población extranjera», que ya representa el 17,1% del total de la provincia. En los municipios de la costa occidental este porcentaje es mucho más acentuado, rebasando el 40% en el caso de Mijas. En la capital malagueña la proporción global es del 8%, aunque varía mucho por distritos: en el Centro once de cada cien residentes provienen de otros países, mientras que en Puerto de la Torre solo es un 3,9%.
El informe también refleja cómo la crisis ha frenado el crecimiento demográfico de la provincia, que en 2010 solamente aumentó un 1%, pero en especial de la capital, que apenas sumó 200 nuevos habitantes. Esta tendencia está en la línea de otras grandes ciudades españolas, algunas de las cuales -como Sevilla, Valencia o Bilbao- incluso han visto caer su población en el último año. Sin embargo, algunos municipios del área metropolitana de Málaga han seguido creciendo, como Benalmádena, Cártama, Mijas, Rincón de la Victoria o Torremolinos.
Escrito por Alternativa, el Jueves, 07 de Julio 2011