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PRINTEAR ARTICULO Artículo "Los poderes fácticos, las prebendas y la austeridad"


LOS PODERES FÁCTICOS, LAS PREBENDAS Y LA AUSTERIDAD

Antonio Fortes Ortiz
Ingeniero Técnico Industrial
Colaborador de la Coalición
'Alternativa Mijeña y Los Verdes'



Hemos visto los pasados días cómo ha conseguido el Alcalde esa complicidad, de la que adolecía el anterior regidor, con los poderes fácticos del Ayuntamiento, lo cual teóricamente debiera favorecer la puesta en práctica del programa de gobierno local que han votado los mijeños/as. Este hecho no ha pasado inadvertido en la oposición y ya la portavoz del PSOE hacía mención a ello en el Pleno de agosto, no exenta de ironía.

No obstante, este cambio de actitud, bien merece un alto en el camino pues todo en esta vida tiene un por qué, que en este caso se nos antoja para nada altruista, no obstante hablamos de “poderes fácticos”.

Zurce que te zurce nos preguntamos el por qué de llevar a Pleno, con el rechazo de todos los sindicatos y la oposición corporativa al completo, el incremento del sueldo que perciben dos altos cargos de intervención (5.000 €/año y 7.000 €/año) solamente con el informe favorable del responsable del área, cuando se predica austeridad. Pudiera ser que este fuese el peaje del momento y la sola embriaguez del ejercicio del poder bastara, al aprobar que se le concediese el papelón de mecenas, eso sí, con dinero ajeno, dinero de todos los mijeños y mijeñas.

El sinsentido de la decisión impuesta se da en la misma sesión plenaria, valga la paradoja, cuando en otro lance de órgano colegiado se elogia la profesionalidad del Asesor Económico por haber detectado que el Ayuntamiento venía pagado, desde hace años, un recargo en la facturación a Endesa, por no proceder con la adecuación, al mercado libre, de la contrataciones de aquellos suministros de más de 10 kW de potencia contratada (hablamos de un 20% por ciento de esa facturación, un quinto, que no debe ser poco de pavo).

Y nos preguntamos, si el Asesor Económico detecta tal anormalidad, que viene afrontándose desde hace años, cómo es posible que se premie de por vida tal falta de rigor, de esas jefaturas “agraciadas” de Intervención, en la fiscalización de la facturación que se abona a comercializadoras de la energía. Qué sin sentido próximo nos deparará el mecenazgo.

Lo dicho demuestra que la legislatura ha comenzado con un orden de prelación, que la sintomatología la dictamina: Mantener satisfechos a los poderes fácticos, sean cuales sean las prebendas, pagar la “facturación” de los compromisos políticos y, de no haber otras cuestiones de índole partidista, la austeridad, palabra marchita y denostada como en su momento fue “sostenibilidad”. Si es que cuando le dan por una palabreja…

15 October 2011 05:49 PM